EL FUTBOL NO ES MERCADO

La Unión Deportiva Logroñés ha sufrido una nueva derrota en casa frente a una Arandina que contó con una interpretación muy favorable de muchos lances del juego por parte del trío arbitral a lo largo del partido.

El encuentro comenzó con pocas oportunidades para ambos conjuntos, pero todo se torcía en el minuto 34 cuando el árbitro dejó pasar un clarísimo penalti sobre el Logroñés, a raíz del cual los 3000 aficionados de la capital riojana se levantaron en señal de protesta. A partir de ese mismo momento, las protestas contra las decisiones arbitrales se sucedían en repetidas ocasiones, hasta llegar al momento de mayor griterío, cuando la hinchada de Viejo Fondo comenzó a cantar “Corrupción en la Federación“.

Tras el descanso, el Arandina Club de Futbol agotó sus tres cambios y, tras ellos, vino el primer gol. Los espectadores en la grada comenzaron a concentrarse en zonas próximas al juez de línea, desde donde vertían insultos y gestos antideportivos contra el trio arbitral. En los siguientes minutos llegaría el segundo gol y con ello el final del encuentro, en cuya finalización, el árbitro abandonó el estadio corriendo ante la oleada de gritos y protestas de la afición local, que se sentía perjudicada por su actuación.

Los jugadores del propio equipo visitante, el Arandina, veían que el partido había sido favorable para ellos, los penaltis eran claros y el gol anulado a la UDL en la primera parte tras inventarse un fuera de juego, era totalmente ilegal.