Nunca llueve a gusto de todos

No son pocas las personas que han reconocido que supieron de Ausejo por primera vez al pasar por la nacional que, en su día, cruzaba el pueblo. Hace años que dicha carretera quedó desplazada, pero la gente seguía reconociendo el pueblo como uno de los lugares del gran punto negro de La Rioja. Siempre han sido señalados como tramos especialmente peligrosos los situados entre Alfaro, Rincón de Soto, Calahorra, El Villar de Arnedo y Ausejo. Y es que, el año pasado, perdieron la vida 15 personas en sus carreteras.

Hoy viernes, 2 de febrero de 2018, se cumplen exactamente dos meses desde que no transitan camiones por la N-232 a su paso por la Rioja. Están obligados a circular por la autopista paralela, la AP-68, a cambio de una reducción en el precio del peaje.

Nosotras hemos querido hacer un análisis de la situación desde todos los puntos de vista.

Los que más han aplaudido la medida adoptada por la DGT son los turismos. Elena Rodríguez, profesora del colegio de Ausejo, conoce muy bien la carretera que va de Logroño al pueblo y no duda en afirmar que

“Se ha notado muchísimo, se conduce con más rapidez, no hay adelantamientos, llegas antes a los sitios y pienso que hay menos contaminación.”

 

Lo cierto es que desde que entró en vigencia la medida no se ha oído ningún accidente en los tramos citados líneas arriba. Aun así, quisimos conocer la opinión de la Guardia Civil al respecto. Pablo, desde el puesto de Alcanadre, nos contestó muy amablemente:

– ¿Cree que el cambio en cuanto a la no circulación de camiones por la N-232 ha sido positivo o negativo?

Yo creo que incide en la siniestralidad de forma bastante positiva, ya que creemos que un porcentaje bastante elevado de la siniestralidad que tenía esta carretera era debido al elevado tránsito de vehículos pesados por la misma.

– Si tan positivo aseguran que ha sido, ¿por qué cree que no se tomó antes la medida?

Yo entiendo que será por decisiones políticas o por no haber las partidas presupuestarias correspondientes para llevarlo a cabo aunque, en mi opinión, se debería haber actuado antes.

– Los aspectos positivos están más que claros, ¿cree que también hay una parte negativa en todo el asunto?

Como he comentado, es positivo por la bajada en la siniestralidad pero negativo en el aspecto económico ya que produce pérdidas importantes en negocios pegados a la carretera y, esto, ha de ser valorado.

 

Sin embargo, no todos están de acuerdo con la orden impuesta. Como en todo hay defensores y detractores y también hemos querido hacernos eco de su opinión.

El Hotel Zenit de Calahorra, situado a 1 kilómetro del casco urbano se encuentra, precisamente, en la N-232. Una trabajadora, que comentó que prefería mantener el anonimato nos confesó que estaba muy preocupada:

¿Os ha afectado mucho el cambio de los camiones?

Demasiado. Antes paraban muchos más camiones, ahora menos. Lo quitaron porque había muchos accidentes y nos ha afectado bastante. Por la noche, hemos pasado de dar 60 cenas a 5 o 6. Están pensando en despedir a gente porque ahora somos muchos ya que hay pocos clientes.

¿Qué solución hubieras dado tú?

Dejar que los camioneros entren a cenar, dormir y a repostar aunque, después, vuelvan a la autopista dado que allí no hay mucho servicio y, el que hay, está muy distanciado de otros.

 

Por otro lado, el gremio de camioneros también se ha posicionado al respecto. De hecho, hemos oído que incluso plantean la posibilidad de llevar a cabo movilizaciones ante la medida adoptada.

César, de la empresa riojana Anodial, respondió atentamente a nuestras cuestiones:

– ¿Te ha afectado la nueva medida de no circular por la N-232?

A mí no me ha afectado porque los camiones de dos ejes podemos seguir yendo por la nacional pero a compañeros míos sí: ahora tienen que pagar un 25% de autopista, no tienen apenas sitios para descansar ni restaurantes donde comer porque algunas gasolineras y restaurantes ubicados a lo largo de la 232 se están planteando cerrar sus puertas ya que se surten, en su mayoría, de camiones.

– ¿Hay malestar entre el sector?

Claro, a todo camión de más de cuatro ejes que no vaya por la autopista la Guardia Civil los sancionará con multas de 200 a 500 euros.

 

Nosotros, en Ausejo, vivimos hace tiempo una situación similar. Opiniones a favor y en contra se mezclaban cuando, en 2006, la nacional se trasladó a su ubicación actual y dejó de pasar por el pueblo. Las discusiones estaban servidas. Mucha gente, alabó la medida. Mientras, el Hotel Maite tuvo que cerrar sus puertas. Felipe San Juan, el que fue dueño del hotel nos cuenta cómo vivió aquello:

– ¿Cómo vivió el cambio de la N-232?

De pasar la circulación por aquí delante del Hotel Maite a hacerlo por la variante… fue un cambio brutal. El negocio, poco a poco, se fue apagando hasta que se consumió del todo.

– Se vieron obligados a cerrar el hotel dadas las circunstancias, ¿cuál piensa que podría haber sido otra solución?

Pienso que si al que le traspasamos el hotel lo hubiera cuidado y dado otra oportunidad se podía haber evitado el cierre.

– ¿Piensa que repercutió en el hotel o en todos los vecinos del pueblo?

Creo que en todo el pueblo. Las cosas no se echan de menos hasta que te faltan. La gente, todavía, lo sigue notando. Tenían muchos servicios: salían al campo y tenían un buen sitio para aparcar, tomarse un café, almorzar, comer, cenar y no solo para el pueblo de Ausejo sino para todo el valle de Ocón, Corera, Galilea y El Villar. Era un punto de reunión para muchos pueblos.

Suponemos que le traerá  recuerdos, ¿qué le comentaban los vecinos tras el cierre? ¿En qué piensa cuando lo ve?

Echan en falta el punto de encuentro, que era un bar amplio, grande y cabía mucha gente. Todavía la gente mayor lo sigue echando de menos.

 

En definitiva, como vemos y hemos sentenciado en el titular, nunca llueve a gusto de todos. Lo que parecía una medida muy aplaudida y consensuada no lo es tanto y hay que atender todos los puntos de vista para entenderlo. Desde aquí, expresamos nuestro deseo de que todas las partes implicadas logren ponerse de acuerdo y arreglen sus diferencias cuanto antes.