El increíble viaje del faquir que se quedó atrapado en un armario de IKEA: un libro que te hace reír y que te cambia al final.

El increíble viaje del faquir que se quedó atrapado en un armario de IKEA. Es el típico libro que eliges para leer porque el título, más extraño imposible, parece que dice “ven y cógeme”. No sabes cómo será, ni de qué tratará pero se gana tu atención. Y lo tienes que abrir, claro. Son 262 páginas, las que te divierten, te enseñan y te hace aprender que no todo el mundo tiene suerte y, menos aún, el protagonista de nuestra historia, Dhjamal Mekhan Dooyeghas (pronunciado llámame cuando llegues), un joven faquir  hindú, que vive de sus trucos y de engañar mucho a la gente.

 

Este libro, cuenta que un hindú, nuestro protagonista, quiere comprar una cama de clavos para timar a su público con sus trucos de faquir. Viaja desde la India hasta Francia (París), solamente para comprar está cama en IKEA. Su trabajo no le aporta mucho dinero por lo que tiene que timar, otra vez. Pero él no tiene ningún problema en ese aspecto. Desde el aeropuerto hasta la tienda lo lleva un taxi, “Taxis Gitanos”, y el conductor aprovecha para tomarle el pelo porque, Dhjamal, no entiende el idioma. Al llegar, pide la cama pero tiene un problema: no le llega el dinero. Él sólo tiene 100 €, de dinero falso, no los 115, 89 € que cuesta.

No se le ocurre ninguna forma de poder ganarlos antes del día siguiente, que es cuando llega la cama, ni tampoco tiene idea de cómo  conseguirlos. Al final, marcha todo ufano a un restaurante donde piensa engañar a alguien con uno de sus trucos. Y así es. Se pone unas gafas, cuyos cristales están rotos, se apoya en la chica que tiene delante  y ésta le tira las gafas al girarse sobresaltada. Al caer, las gafas se desmontan y él tiene la excusa perfecta para acusarle de habérselas roto. La chica le invita a comer y le da 20 €, más que suficiente para conseguir su preciada cama. El faquir espera, escondido, a qué clientes y guardas de seguridad se vayan porque tiene la intención de quedarse a dormir en la tienda de Ikea.

Aprovecha para probar todas las camas, sillones y cojines pero, asustado al oír voces, se esconde en un armario juvenil. Lo que no imaginaba, ni en sus peores pesadillas, es que un par de operarios vienen a llevarse ese armario. Y aquí, por fin, es dónde enganchamos con el título de nuestro libro.

El faquir empieza a viajar y a viajar por medio mundo. La historia tiene sus buenos y malos momentos. Episodios llenos de humor recogiendo las más disparatadas aventuras yendo de Francia a Inglaterra, de allí a Barcelona, pasando también por Roma y Trípoli… bueno, un viaje muy de locos pero que hará que el faquir cambie la manera de ver el mundo. Y también nos cambiará a nosotros.

Nos encontramos zambullidos en un mundo tremendamente globalizado. Todos conectados. O bueno, mejor dicho los que pueden. Sin embargo, el tema de la inmigración sigue siendo demasiado difícil, demasiado duro, oscuro e injusto, la mayoría de las veces.

La gracia es que nosotras ayer nos dimos cuenta del verdadero significado de la portada de este libro. Aunque es un libro largo se lee bien. El autor, Romain Puértolas, tiene que ser un genio para te rías con un humor realmente extraño y cuando acabas la última página te quedas de piedra, pensando.

No decimos más. Os dejamos con esta pequeña joya que te hace sonreír y pensar al mismo tiempo. Que hace un clic cerquita del corazón. Puede ser una lectura genial para estas vacaciones de Semana Santa, ¿no creéis?.