El espíritu del día 8 de marzo continúa vivo en todos los logroñeses
Viernes, 30 marzo 2018
Publicado en: Reportero Social
El pasado 8 de marzo la ciudad de Logroño, al igual que el resto de España, fue el escenario de los diferentes actos del Día de la Mujer. Este día se celebra desde 1975, cuando la ONU lo declaró Día Internacional de la Mujer Trabajadora, pero las movilizaciones surgida este año en España no tienen precedentes. La foto que hemos escogido para ilustrar esta noticia así lo demuetra. Es por esto que este grupo de trabajo hemos decidido expresar nuestras sensaciones, sentimientos y emociones sobre este día. Le hemos pedido a nuestra tutora, Beatriz, que hable en nombre del grupo. Esto es lo que ella ha escrito:
“Desconozco hasta que punto el hecho de que yo exprese aquí mis reflexiones sobre el Día de la Mujer puede hacer que el Jurado de Reportero Escolar no valore esta noticia para concurso. Pero, como mujer, me siento obligada a expresarla y a acompañar a mis alumnos en su deseo de publicar esta noticia.
Personalmente me considero una mujer privilegiada puesto que nunca, ni personal ni profesionalmente, me he sentido discriminada por serlo. Las personas con las que he convivido nunca me han hecho sentir que, por ser mujer, no podía o no debía hacer determinadas cosas. Sin embargo, sí he sido testigo (como casi todas las mujeres alguna vez) de micromachismos en forma de comentarios inapropiados hacia otras mujeres o hacia mí que, aunque muchas veces no son malintencionados, sí son desagradables. Como profesora creo que tengo una responsabilidad importante y estoy obligada a fomentar entre mi alumnado la igualdad real, la no discriminación y que debo actuar de forma activa en este sentido. En primer lugar, tengo que asegurarme de que, de mí, tanto mis alumnas como mis alumnos reciben las mismas oportunidades, ayudas y, en definitiva, el mismo trato y en segundo lugar, considero que debo visibilizar en mis clases el trabajo y talento de muchas mujeres que han contribuido con su ejemplo y, en ocasiones, con su activismo, a que otras, aunque hemos tenido que andar el camino porque nada se consigue sin esfuerzo, lo hayamos encontrado relativamente allanado. El machismo se erradica con educación y creando oportunidades reales para las mujeres, que por el hecho de serlo, disponen de menos que los hombres. Todos, mujeres y hombres, deberíamos sentirnos moralmente aludidos cuando se trata de acabar con la desigualdad. Por eso me satisface enormemente lo vivido durante el pasado día 8 de marzo en toda España. Acudí a la manifestación de Logroño y me llenó de esperanza ver en ella a mujeres de todas las edades y condiciones. Si todos remamos en la misma dirección, este movimiento de defensa de los derechos de todos es, en mi opinión, imparable”.