A white and... ¡very cold day!
Miércoles, 28 febrero 2018
Publicado en: Actualidad
Pese a que los espacios dedicados al tiempo ya lo habían previsto y que habían informado de ello por activa y pasiva, parece que la nieve tiene esa capacidad de sorprendernos y… cautivarnos a partes iguales y es que, a pesar de los inconvenientes que puede llegar a generar (sobre todo para aquellos que deben desplazarse para trabajar, estudiar, personas de edad avanzada o movilidad reducida…) debemos de reconocer que ¡nos ha encantado disfrutar de una jornada como ésta! Y es que, admitámoslo, ¿hace cuánto inviernos que no había hecho acto de presencia en nuestro pueblo, Autol? Si es que, de seguir así, los niños iban a terminar pensando que eso de la nieve es una cosa abstracta que sólo se ve en las pelis. Así que, tras finalizar nuestra jornada lectiva, nos hemos lanzado a la calle a disfrutar de los pequeños pero ¡qué gratificantes! juegos que proporciona esta precipitación: guerra de bolas, el típico muñeco, los descensos en trineo (o, en su defecto, un buen plástico nos saca del apuro…). Eso sí, una vez que nos hemos hinchado a reír y hemos empezado a sentir los primeros síntomas de congelamiento en nuestro organismo (manos, nariz, oídos…), hemos vuelto a la cruda realidad y es que estamos inmersos en lo que los alumnos bautizamos como “semana horribilis” que, básicamente, consiste en que todos los días tenemos uno o varios exámenes que realizar o trabajos que entregar… ¡para que luego digan que ser estudiante es fácil! Así que, ¿qué mejor que sobrellevarlo concediéndonos otro pequeño, cálido y dulce capricho?, si es que el estudio con una buena taza de chocolate caliente, se sobrelleva de otra manera, ¿no creéis? Por cierto, si sois de aquella clase de mortales que están exentos de estas “quehaceres académicos”, os recomendamos un plan infalible: sofá + mantita caliente + maratón de pelis / libro. ¿Sabéis?, a nosotros la nieve nos retrotrae a nuestra infancia y a los clásicos como: Willow, La princesa prometida, Eduardo manostijeras, Solo en casa…, o a la saga de Harry Potter, Las crónicas de Narnia… ¿os apuntáis?