La felicidad, el objetivo de la vida del logroñés, del riojano, del español, de cualquier vida
Martes, 28 marzo 2017
Publicado en: Actualidad
Bien, ahora mismo tú estás leyendo esto, pero… ¿realmente serás capaz de entenderlo? Ahora hagamos la prueba, ¿te parece?
Hay una frase de una canción que me gusta mucho, “si alguna vez sientes que no eres nada, eres completamente perfecta para mí.”
Ahora situemos esta frase en una situación real:
Un día cualquiera te levantas y empiezas a planear lo que harás en las próximas horas, llega la tarde y te das cuenta de que ese día no ha cumplido tus expectativas, y te sientes mal con todo el mundo, te sientes mal contigo y con la sociedad. Echas la culpa a tus padres, al maestro o a diversas personas inocentes, incluso llegas a culpar al perro que aquella mañana te mordió por acto reflejo de haberle pisado una pata.
Y así te ocurre un día tras otro, ningún día cumples tus expectativas y te sientes mal continuamente, pero… ¿Y si en realidad ese día ha sido mejor de lo que tú te crees?
Podría haberte pasado infinidad de cosas malas en cualquier segundo, podría haberte caído un rayo encima o haber perdido a alguien realmente importante para ti y sin embargo sigues viendo la parte negativa.
Día tras día te odias a ti misma y piensas que no sirves para nada, pero, ¿es eso cierto o tan sólo es tu sentimiento en una ocasión depresiva? Quizá eres tú quien crees que no vales para nada, mientras, al mismo tiempo eres un ejemplo a seguir para otra persona, quizá eres tú y tu sentimiento negativo el que ve las cosas desde otro punto de vista que te hace perder la esperanza en ti mismo.
Y es que, ¿por qué siempre vemos sólo lo malo? Damos por hecho que vamos a tener salud, amor, dinero, compañía… Cuando realmente no son cosas que sean fáciles de conseguir y cuando no las tenemos somos realmente personas frías. Yo soy capaz de entender mentes complejas, y es que me encanta la psicología, pero nunca me la aplico. Es decir, sería capaz de entender por qué un violador viola, un asesino mata o un ladrón roba, pero ¿mi mente? Mi mente es como un infinito de cosas por descubrir, por conocer.
Esta regla jamás seré capaz de conseguirla, pero para el resto de personas ahí va un consejo: Vosotros sois y seréis dueños de vuestra vida, de vuestros días, nada nunca está predestinado, el destino no existe. Son nuestros pensamientos y nuestras ideologías los que nos llevan a actuar de tal forma, así que cuando despiertes o te encuentres en un mal día recuerda que siempre serás perfecto para alguien, y que una infinidad de cosas buenas podrían ocurrir en tu día y es tu negativismo el que no te deja verlas.
Cree en ti, cree en tus propósitos, el no puedo y el no existe en realidad es un no creo, no creo en mí y en mi capacidad de realizar las cosas, así, poco a poco, podrás idealizar tus metas y sentirte ganador de tu propia vida.