Soy diferente. Y ¿Qué?

Viernes, 24 marzo 2017

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Hola, me llamo Javier y tengo autismo. Vaya forma de presentarse ¿verdad? Pues mucha gente pensará que es buena forma, que es muy concreta, simplemente con decir mi nombre y lo que me diferencia de los demás ya lo saben todo de mí, pero sabéis qué, yo no soy sólo eso, no soy sólo autista, el autismo es lo que me diferencia de la mayoría de personas pero no soy sólo eso, así que si os parece me voy a presentar correctamente.
Hola a todos, me llamo Javier pero mis amigos y familiares me llaman Javi, vosotros también podéis llamarme así, si queréis. Tengo 23 años, soy moreno y tengo los ojos marrones. Pensaréis que es un color muy común, pues sí, pero a mí me gusta aparte hay muchos tonos de marrón. Él mío es del tono del chocolate, pero no de cualquier chocolate sino del que no tiene leche, del chocolate puro, ese que les sabe amargo a los niños. Mido 1’86 haciendo que parte de mi familia se vean como pequeños pitufos de esos que salen en las películas pero claramente sin ser azules. Nací el 15 de Octubre de 1993 después de un embarazo que no tuvo ningún problema. Mi madre tenía 25 y mi padre 29 cuando nací y siempre han estado acompañándome a lo largo de mis 23 años de vida. Mi madre me tuvo por cesárea. Pesé 3kg y medí 50cm. Era un bebé tranquilo, dormía mucho y comía, también mucho. La combinación perfecta. A los 10 meses empecé a caminar y a los 11 meses me caí y no volví a caminar hasta un mes después, por miedo a caerme. Empecé a hablar con poco más de un año y a los 15 meses sabía decir otorrinolaringólogo. A mí, me gustaba repetir las cosas, era divertido, aun lo sigo haciendo y a esa edad no me gustaba dar mucha conversación así que mi lenguaje, según expertos era un lenguaje funcional y repetitivo. Cuando estaba con niños no hablaba, no porque no me gustara estar con ellos, me encantaba, sino porque mi comunicación no era igual a la de los otros niños. Puede que no les pudiera decir “Hola me llamo Javi”, pero sí que me sabía todas las marcas de coches. A los tres años, empecé el colegio. Me movía mucho, no ponía atención y me costaba saber cómo se encontraban los demás. A los 4 años, me diagnosticaron autismo, la verdad que para mí no supuso una gran diferencia en ese momento al menos. A los 8, iba a dos colegios diferentes, tres días iba a un colegio donde había más personas como yo, y dos días iba a un colegio “normal” donde me relacionaba con niños de mi edad.

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Desde siempre, los veranos, voy a mi pueblo donde paso el mes de Julio y Agosto con mis abuelos, mis tíos y mis primos. Vamos a la playa, jugamos al baloncesto, al futbol y hacemos carreras nadando. Yo siempre gano. Siempre se me ha dado bien la natación aunque he probado un montón de deportes diferentes, como por ejemplo: Golf, hockey sobre patines, baloncesto… Pero mi deporte preferido, sin duda es la natación. En mi tiempo libre también hago puzles, en tres días me hago uno de 1000 piezas. También adoro la música, siempre que salgo de casa llevo conmigo un pequeño mp3 con unos auriculares azules y rojos. Uno de los cantantes que más, me gusta es Macaco. Todas sus canciones son divertidas y con mucho ritmo. Otra de las cosas que más me gusta hacer es ir al centro de día, me lo paso muy bien allí. Hacemos talleres, jugamos con ordenadores, escribimos, hacemos deporte, musicoterapia y salidas a entornos vivos.
Tengo muchos amigos. Con ellos voy algún fin de semana a otra asociación donde conocemos gente y compartimos salidas. Muchas veces, mis amigos y yo compartimos nuestra admiración por los ventiladores. Me fascina su movimiento constante.

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En semana santa y cuando tiene alguna semana de fiesta mi madre, mis abuelos y yo vamos a La Rioja donde viven mis primas y de donde son mis abuelos. Tenemos una casa en Villamediana y allí, muchas veces cenamos toda la familia junta. Lo que más me gusta de La Rioja es el chorizo y las chuletillas. ¡Están tan buenas!
Soy muy educado. Las personas muchas veces se sorprenden, ya que piensan que el autismo está reñido con eso, pero no es verdad. Que sea autista no significa que sea maleducado. Soy honesto, buena persona y muy trabajador. Mi memoria fotográfica es mejor que la de la media y tengo una gran capacidad de superación.
Puede que no verbalice las cosas, pero lo trasmito con gestos y detalles que hace que las personas me comprendan y les ayude a acercarse a ver el mundo como yo lo veo.
Bueno así soy yo. Espero haberme presentado correctamente. Esperad, hay algo que no os he contado. Algo muy importante.
Yo soy feliz.
Así como lo leéis. Soy feliz, que es por lo qué realmente luchamos todos. Mi familia me adora, me respeta, me quiere y me valora por como soy, sin juzgarme. Mucha gente juzga sin conocer. Juzga por la ropa, el pelo, la música y por muchas otras cosas. Pero ¿realmente tienen derecho a juzgar sin conocer a la persona por el simple hecho de ser diferente? ¿Cuál es el problema de ser diferente? Yo os responderé eso. A las personas les da miedo lo diferente, ¿pero cuál sería la gracia de un mundo donde todas las personas son iguales? Todos tendrían el mismo pelo, el mismo color de ojos, la misma altura y lo más importante, las mismas ideas.
Lo normal es aburrido.

Y con esto me despido.

Marta Salinero

Reynoticias

Curso: 4º ESO

Tutor: Susana Palacios Martínez

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