Juan Carlos Castroviejo Céspedes: “Las injusticias más graves son las que sufren los niños”

Hoy entrevistamos a Juan Carlos Castroviejo Céspedes, nacido en Buenos Aires. Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Zaragoza. Es gerente de la empresa ROB JOR BEBE S.L. Ha trabajado en el área de empresas y entidades deportivas.

Es socio de UNICEF Comité Español desde 1993. Fue nombrado vicepresidente en 2008 y presidente en 2013 de UNICEF Comité La Rioja.

En representación de UNICEF Comité La Rioja, entre otros:

• Ha sido impulsor de iniciativas con pequeñas y medianas empresas, como Multiplica, organización de foro con empresarios, alianzas, etc.
• En 2015 presentó junto con La Cátedra Unesco de Ciudadanía Democrática y Libertad Cultural de la Universidad de La Rioja  el primer informe de la situación de la infancia en La Rioja.
• En diciembre de 2016 se ha encargado del desarrollo junto con el Gobierno de La Rioja de realizar una campaña pionera en España a nivel de administración pública, consistente en una financiación colectiva por el sistema “crowfunding” para recaudar fondos a beneficio de los niños víctimas del conflicto en Siria.

-¿Por qué decidiste trabajar activamente en Unicef?

 Quería sentirme socialmente útil; además pienso que las injusticias más graves son las que sufren los niños. Me decidí por UNICEF por su transparencia, legitimidad (organismo de la ONU), eficiencia y eficacia.

 

-¿Hay mucha gente trabajando en Unicef Comité La Rioja?

El comité lo componen una persona contratada y veinte voluntarios, de los cuales diez formamos la junta directiva.

 

-¿Qué labores hacéis en Unicef Comité La Rioja?

Los dos objetivos generales son la sensibilización de la sociedad y la obtención de fondos. La sensibilización se refiere al objetivo de poner en conocimiento de la sociedad el incumplimiento de los derechos del niño recogidos en la Convención de Derechos del Niño, no sólo en los países en desarrollo, sino también en países con recursos como España, donde la desigualdad es la principal forma de incumplimiento de estos derechos. El objetivo de obtención de fondos es esencial para llevar a cabo los proyectos de supervivencia, educación y protección de la infancia realizados en los países en desarrollo.

 

– Con respecto al resto de España: ¿en La Rioja somos muy colaboradores con Unicef?

En La Rioja estamos unos 2500 socios de UNICEF. El porcentaje sobre la población y la cuota media coinciden casi exactamente con los nacionales.

 

-¿Cómo es la situación actual de la infancia en La Rioja?

En 2016 sacamos junto con la Universidad de La Rioja un informe sobre la situación de la infancia en La Rioja. Como resumen podemos afirmar que hay un alto porcentaje de pobreza relativa infantil (algo superior al de la media nacional); en educación los datos son mejores que los del resto de España y en salud infantil tenemos tres problemas fundamentales: asistencia psicológica infantil, obesidad infantil y alcoholismo y drogadicción juvenil.

 

-¿Se ha conseguido recaudar muchos fondos en la última campaña realizada en La Rioja a beneficio de los niños víctimas del conflicto en Siria?

La campaña era muy novedosa por vincular los fondos públicos con las aportaciones de la sociedad. Fue   una primera experiencia que consideramos muy positiva pero también mejorable en el futuro. En total conseguimos 16.000 euros para los niños afectados por la emergencia en Siria.

 

-¿Qué campañas actuales se están llevando a cabo en Unicef Comité La Rioja?

Estamos trabajando con el Gobierno de La Rioja para atender las necesidades derivadas de las situaciones de emergencia en el mundo que cada vez son más numerosas, duraderas y complejas. En otro orden de cosas, hemos firmado un convenio con la Consejería de educación para introducir en los centros educativos un programa de educación en valores basado en la convención de derechos del niño.

 

-¿Qué les dirías a los jóvenes de La Rioja para que fuesen conscientes de los problemas de la infancia en nuestra propia Comunidad?

En La Rioja, como no puede ser de otro modo, no hay problemas de desnutrición, de escolarización o de falta de asistencia médica; sin embargo y fruto de la desigualdad, sí que hay problemas de mala alimentación, y de dificultades en los ámbitos educativos y de salud. Muchos niños inician el camino hacia el futuro con un lastre importante que les hace muy difícil salir de unas condiciones de vida preestablecidas en su ámbito familiar. Es lo que llamamos suelo pegajoso y creo que las peores injusticias son las que se proyectan en el futuro. Un niño malnutrido seguramente tenga problemas de salud durante toda su vida. Un niño con peores condiciones en educación será complicado que pueda acceder a estudios superiores. Un niño con deficiente atención psicológica es muy posible que tenga desequilibrios psicosociales el resto de su vida.