Las drogas
Una droga es una sustancia natural o sintética que modifica las funciones vitales en los seres humanos, especialmente alteran la actividad nerviosa y motora.
Muchas personas piensan que los medicamentos son drogas, en realidad no lo son, son fármacos (sustancias que sin ser alimentos, vitaminas o nutrientes, al ser consumidos, hacen cambios en un órgano, en un tejido o en un sistema), los cuales pueden provocar cambios positivos (aspirina) o negativos (marihuana).
Si un fármaco actúa en el sistema nervioso central se denomina psicofármaco. El: cuando este está recetado por un médico se le llama medicamento, porque tiene fines terapéuticos, pero cuando son comprados en la calle para drogarse con un fin “recreativo”, se llama droga.
Los tipos de drogas más consumidos y más comunes son: el tabaco, el alcohol, la marihuana y la cocaína
El tabaco: es un producto vegetal que se obtiene de las hojas de la planta del tabaco que son conocidas como “Nicotiana”. Es un producto originario de América. Es considerado una de las sustancias más nocivas y adictivas consumidas libremente por el ser humano en la actualidad
El alcohol: es un depresor del sistema nervioso central que pertenece al grupo de sedantes. Es la droga mas consumida en nuestro país. Se obtiene a partir de la fermentación de cereales, frutas o vegetales.
La marihuana: proviene de la planta del cáñamo de la India y la parte que contiene la droga se encuentra en las flores (comúnmente llamadas “cogollos”). Tiene más de 400 sustancias químicas y el químico que causa la intoxicación en los usuarios es el THC (Tetrahidrurocannabinol). El THC crea los efectos que alteran la mente, por eso se clasifica a esta sustancia como droga.
La cocaína: es un estimulante extremamente adictivo que afecta directamente al cerebro. Es una de las drogas que se conocen desde hace más tiempo. Se suele vender en la calle en forma de polvo blanco, fino y cristalino.
Nos centramos en los graves daños que nos puede producir el alcohol, ya que es una droga “legal” muy cercana a la población. Los efectos del alcohol en el organismo son numerosos:
En el cerebro: el alcohol en exceso inhibe las funciones de la región frontal, por lo que disminuye la memoria, la capacidad de concentración y de autocontrol.
En el hígado: los efectos de esta metabolización son náuseas, vómitos y dolor de cabeza.
En el riñón: elimina más agua de la que ingiere y provoca que el organismo busque en otros órganos. Esto provoca que las meninges pierdan líquido, lo que genera dolor de cabeza
En el estómago: cuando se bebe en exceso, causa erosiones en la mucosa del estómago y provoca ardor estomacal.
En los pulmones: si el alcohol circulante es demasiado, detendrá la respiración.
En el corazón: el alcohol provoca un aumento de la actividad cardiaca y aceleración del pulso. Cuando el alcohol llega a la sangre, se produce una disminución de azúcares, lo que provoca una sensación de debilidad y agotamiento físico.
