El principio del fin

“El periodismo es una maravillosa escuela de vida.”

Alejo Carpentier.

Comenzamos con una tímida presentación, serpenteando por los entresijos más intimistas del teatro (¡Gracias Cipriano!) y del periodismo radiofónico (¡A ti también, Cristina!). Quisimos ilustraros un poquillo con los no tan románticos orígenes del día de San Valentín e izamos nuestras velas siendo químicos por un día. Entrevista, reportaje, entrevista, reportaje… ¡Y más, más…mucho más! Son 19 entradas con esta, poco para algunos y mucho para otros, pero detrás guardan un constante e intenso trabajo de equipo. (Y estrés, no pequemos de olvidadizos…)

En ocasiones parecemos despreciar todo aquello que implica ser un periodista. Olvidamos que la rigurosidad es imprescindible, que la correcta redacción es inseparable, que la ética no es algo que se use sola y únicamente en ciertas situaciones. ¡Recordemos que la buena literatura germinó en el periodismo antes de sembrar su cosecha en nosotros! Grandes como Mario Vargas Llosa, Gabriel García Márquez…

Puede que el rumor apagado del tecleo en las máquinas de escribir haya sido sustituido por los teclados de ordenador (que tampoco evocan un melodioso canto, precisamente), pero el periodismo ha sabido nutrirse de las nuevas tecnologías que tanto atrapan a la juventud. El periodismo es poesía y, tal y como decía Bécquer: “(…) mientras haya un misterio para el hombre, habrá poesía.” Con lo cual, afilen sus lápices porque el periodismo es inmortal.

Ahora, sólo queda agradecer a la UNIR y a Reportero Escolar, por hacer posible este magnífico concurso. A todos los profesores, compañeros e instituciones que se han prestado a ayudarnos. A nuestros padres por genuinamente soportar nuestras ansias por salir a la calle a grabar el mundo…Y, sobre todo, a nuestra tutora, Susana Palacios Martínez, por no permitir que perdiésemos la motivación en ningún momento.

Aquí os dejamos nuestro último vídeo…

¡Ahora sí! ¡Buenos días, buenas tardes y buenas noches!