Las hogueras de san Antón calientan la noche alfareña

Este año el día de las hogueras no dio tregua, como suele pasar desde hace años. Un viento helador comenzó a levantarse a media tarde y todos los alfareños mirábamos al cielo como pensando “¡Qué mala suerte, hoy que es día de estar al aire libre!” Pero aún así, las calles y descampados se llenaron de hogueras y de alegría, de olor a carne asada y del rojo del fuego.

Las hogueras de San Antón son una tradición con muchos años de historia muy relacionada al municipio de Alfaro. Estas hogueras tenían una finalidad purificadora y sanadora, aunque ahora es una actividad que esperamos todos cada año para divertirnos con nuestra gente. Se celebra el viernes más cercano a la fecha de la fiesta.

Normalmente, se suelen quemar más de medio centenar de hogueras en todo el pueblo , algunas de las cuales resultan verdaderamente espectaculares. Los vecinos colaboran en la hoguera de cada barrio, las cuadrillas organizan las suyas propias, familiares, quintos… y se come chistorra, salchicha blanca, salchicha roja, panceta, chuletillas y patatas asadas. Las hogueras se encienden sobre las 19:00 de la tarde pero la municipal, en la plaza Tejada, a las 18:00. Como siempre, con el reparto de panceta, salchicha roja y patatas se colaboraba con Cáritas-Alfaro para ayudar a los más desfavorecidos del pueblo.

Para poder participar en esta tradición y  para poder tener tu propia hoguera hay que pedir permiso al ayuntamiento mínimo una semana antes de la fiesta para que los responsables de seguridad pongan la arena para no dañar las calles de Alfaro y tenerlo todo controlado.

La fiesta, este año, resultó agradable, como siempre, y a pesar de que, cerca de la medianoche, de algunas hogueras solo quedaban las brasas, la gente joven del pueblo se encargó de que Alfaro estuviese iluminado hasta altas horas de la madrugada.