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Esta semana, hemos decido colaborar con la ONG AMNISTÍA INTERNACIONAL, la cual está haciendo una campaña de ayuda y apoyo a cuatro personas que están encarceladas de manera injusta. Estas son OMID KOKABEE (Irán), WAFAE CHARAF (Marruecos), YVES MAKWAMBALA Y FRED BAUMA (República Democrática del Congo). Son presos de conciencia que van a recibir la ayuda de esta ONG y gracias a ella, van a poder recibir apoyo moral desde todos los países del mundo y así, sabrán, que su causa está siendo investigada y que no están olvidados ( algo especialmente importante en situaciones como esta ) . En años anteriores AMNISTÍA INTERNACIONAL ya ha conseguido mejorar y acortar el periodo de condena.

Esta organización tiene unos objetivos muy claros, entre ellos se encuentran defender los derechos humanos, la verdad, la justicia, la violencia de género, por la dignidad de personas necesitadas, el derecho a la libertad de expresión y también, la liberación de presos de conciencia.
Estas cuatro personas están encarceladas de manera injusta por los siguientes casos:

• OMID KOKABEE, es una científico iraní de 33 años que fue detenido el 30 de enero de 2011 cuando regresaba de estados unidos, donde cursaba estudios de doctorado. paso 15 meses en aislamiento para conseguir unas “confesiones”. fue condenado a 10 años de prisión por negarse a trabajar en proyectos de investigación para IRÁN y por falsos cargos relacionados con vínculos académicos con instituciones en el extranjero. Este joven tuvo unas calificaciones excelentes en la prueba de acceso a la universidad, una de las más altas de todo irán, y empezó un doble grado en Física Aplicada e Ingeniería Mecánica en Teherán. También realizó estudios en el Instituto de Ciencias Fotónicas de Barcelona. Desde que obtuvo la licenciatura universitaria en 2005 lo “invitaron” varias veces a trabajar en varios proyectos militares y de inteligencia. Él siempre se negó. Su juicio estuvo lleno de irregularidades. Se retransmitió por la televisión oficial iraní, lo que constituye una violación de su derecho a la presunción de inocencia. Se le negó hasta el juicio el derecho a contar con un abogado, y no se presentaron pruebas contra él, aparte de sus relaciones públicas y perfectamente conocidas con instituciones académicas estadounidenses. Amnistía Internacional lo considera preso de conciencia y ha lanzado esta petición conjuntamente con las organizaciones United4Iran, Committee of Concerned Scientists, la American Physical Society y el colectivo de activistas freeomid para conseguir la excarcelación inmediata y sin condiciones de Omid Kokabee.

 

• WAFAE CHARAF, es una activista política y miembro de la asociación Marroquí de derechos humanos, cumple una condena de tres años de prisión. esta mujer de 26 años fue acusada de difamación tras denunciar haber sido secuestrada y torturada por unos desconocidos durante varias horas tras asistir a una manifestación. Su testimonio era que dos hombres la habían golpeado y amenazado con mas violencia si no ponía fin a su activismo. Las organizaciones de derechos humanos denuncian que no es la primera vez que se utilizan este tipo de actuaciones para disuadir a los activistas. El régimen marroquí, señalan, emplea la acusación de denuncia falsa para castigar a los que se atreven a denunciar tortura o agresión. ”¿Cómo es posible que la víctima acabe en la cárcel tras presentar una denuncia, en lugar de buscar a los agresores?”. La propia Wafae a afirmado que el juicio ya estaba pactado de ante mano para disuadir a activistas como ella

• YVES MAKWAMBALA Y FRED BAUMA, fueron detenidos el 15 de marzo de 2015 cuando participaban en una conferencia de prensa del movimiento juvenil Filimbi en la República democrática del Congo. Este movimiento anima a la participación de jóvenes en acciones y debates políticos pacíficos. Están acusados de traición, intento de golpe de estado y tentativa de asesinato del jefe de estado.
  Tras su detención, estuvieron recluidos dos semanas en un centro secreto. También los interrogaron en secreto —a Yves durante 40 días, a Fred durante 50— y se les impidió recibir visitas de amigos o abogados. Ahora están en espera de juicio en una cárcel de Kinshasa, acusados de formar una banda delictiva y de intentar derrocar el régimen del presidente Kabila.
  Según sus abogados, no hay ninguna prueba criminal contra ellos. Pero este caso tiene motivación política y, de ser declarados culpables, Fred e Yves podrían ser condenados a muerte. Las autoridades han intentado etiquetarlos de “terroristas y conspiradores”. Son todo lo contrario: presos de conciencia, encerrados por promover la democracia e intentar que el gobierno rinda cuentas de sus actos.

PARA PODER COLABORAR CON ESTA CAUSA SOLO TENÉIS QUE METEROS EN LA WEB DE AMNISTÍA INTERNACIONAL https://www.es.amnesty.org/regalatuspalabras/